La Commonwealth le dió a Musharraf hasta ayer para levantar el estado de emergencia que impuso el pasado 3 de noviembre. La iniciativa de la organización llega después de que Musharraf obtuviera una doble victoria. Por un lado había conseguido enmendar por decreto la Constitución para dar base legal a la declaración del estado de excepción y, por otro, dotar de cobertura a las acciones que tomó desde el 3 de noviembre. La enmienda estipula que la declaración de este estado de excepción fue hecha de forma «válida» y que «no será puesta en cuestión por ningún tribunal o foro». Por su parte, el Tribunal Supremo paquistaní desestimó el único recurso de la oposición que quedaba en pie contra su reelección como presidente.
Los ministros de Exteriores de la Commonwealth se reunieron ayer en Kampala (Uganda). Allí tomaron esta drástica decisión : sancionar a Pakistán como miembro de la organización, según informó el Secretario general del grupo, Don McKinnon. Así, el comité de ministros «ha suspendido a Pakistán de los Consejos de la Commonwealth hasta que se produzca la restauración de la democracia y el estado de Derecho», declaró McKinnon. La decisi
Por su parte, el Ministerio paquistaní de Asuntos exteriores consideró que la decisión de suspender a Pakistán como miembro "con efecto inmediato" de la Commonwealth "no es no razonable y es injustificada".
El estado de excepción, en vigor desde el 3 de noviembre, fue defendido por Musharraf como una respuesta ante el aumento de la violencia extremista y la "injerencia" de los jueces en la política del Ejecutivo en medio de la crisis política abierta desde hace meses.